viernes, 21 de enero de 2011


Banyan Tree Corniche Bay






Banyan Tree Corniche Bay es la nueva definición de la vida en una isla exótica: cabañas individuales en la montaña cobijadas por una hectárea de jardines perfectamente diseñados que gozan de ininterrumpidas vistas hacia el océano Índico.
El concepto sobre el que trabajamos fue "discreción e inteligencia ambiental", para lograr un refugio de lujo pensado para el relax, y confort de sus ocupantes, haciendo a estos soñar con su diseño fresco y natural, con vacaciones idílicas entre maderas de bambú y mar turquesa.
Este  lujoso complejo turístico inmerso en la rica vegetación tropical de la zona, cuenta con una vista insuperable de la montaña de Morne Brabant, sitio natural que forma parte del Patrimonio de la Humanidad Unesco por ser una de las costas más bellas del mundo.
Nuestro proyecto combina el lujo con innovativas estrategias ambientales que preservan el rol dominante del paisaje natural. Hemos elegido usar materiales locales y hemos integrado sistemas de alta eficiencia energética de modo tal que el lujo se pudiera transformar en autosuficiencia energética; es por ello que, las viviendas están muy lejos de las cabañas salvajes.
Al ver el proyecto lo primero que nos llama la atención y capta todo nuestro interés es la cubierta; ya que se trata de una losa ondulante, sinuosa, orgánica como la selva que la rodea. Las vigas de madera se colocan con diferentes inclinaciones permitiendo crear sobre ellas una superficie reglada. En el interior está cubierta reglada genera espacios dinámicos, con diferentes alturas y que fugan hacia el exterior poniendo el interior en contacto con su entorno.

Debido a la situación aislada de las Islas Mauricio y también para crear un vínculo entre el paisaje del lugar y las nuevas construcciones se utilizaron materiales autóctonos en la medida de lo posible; siendo el principal la madera, con la que se soluciona en su gran mayoría estructura y cubiertas.

El agua es el segundo elemento que se encuentra presente en todos los rincones del proyecto favoreciendo una vez más la integración de las viviendas con su entorno natural salvaje. Y por último pero igual de importante la vegetación, siendo estos los elementos dominantes del proyecto.

El emplazamiento juega un papel importante. El clima caluroso llevó a la elección de techos elevados y la belleza del agua turquesa del mar inspiró a ubicar las villas de manera tal que desde cada una de ellas se tenga visual hacia el mar a través de los grandes ventanales utilizados.
Estos materiales además de crear ese lazo de unión entre la naturaleza de isla y las viviendas favorece el buen envejecimiento de las construcciones ya que los materiales están preparados para soportar las condiciones climáticas de la zona.
En su afán por mimetizarse con su entorno la estructura de las viviendas se ha proyectado en madera al igual que las cabañas que los indígenas construyen en estado salvaje. La inspiración de su arquitectura evolucionó a partir de una sola línea que luego se transformó en una infinidad de curvas para reflejar la topografía de la tierra. 


Todas las cabañas están conectadas a través del lenguaje común de los techos: cubiertas onduladas en madera natural, cuya geometría permite la máxima ventilación natural, además de consentir la recolección de agua de lluvia para reciclar, lo que crea una familia de diseño uniforme. Tienen una superficie total que oscila entre 540 y 930 m², y todas están ubicadas en lotes de entre 0,8 y 1,25 hectáreas.

Los espacios habitables tendrán un recubrimiento de listones de madera dura, y el espacio principal contará con puertas corredizas de cristal integradas perfectamente a los muros de cristal mediante acero inoxidable de alta calidad. Estas se abrirán hacia una gran terraza abierta recubierta de madera, permitiendo así la facilidad de entrar o salir. Los senderos de entrada serán de grandes losas de roca volcánica.

Entre sus comodidades, están dotadas de interiores con aire acondicionado, piscinas individuales, jacuzzi, deck de yoga, home theater exterior, las habitaciones principales conectan con la piscina y tienen un baño con sauna y spa con recubrimiento en el piso de piedra caliza laminada, además de habitaciones para leer y relajarse.











Son seis tipos de cabañas:

Tipo I1
Tipo I2


Tipo S

Tipo U1













Tipo U2

Tipo T


El complejo además cuenta con una espectacular cancha de golf y el Banyan Tree Hotel y Spa, dentro del resort sobre la orilla del mar. Además, la energía solar será utilizada para permitir el funcionamiento de vehículos eléctricos para trasladarse tanto en el campo de golf, hotel y cabañas.
Banyan Tree Corniche Bay
Arquitecto: Foster + Partners
Año de Diseño: 2007.
Ubicación: Bahía de Corniche, República de Mauricio
Dimensiones del terreno: 470 Hectáreas.
Precio mínimo aprox.: US$500,000


1 comentario:

  1. Este proyecto nunca llegó a realizarse cierto??
    En la página de los hoteles Banyan tree no hay ninguna referencia y además en la pagina de Norman Foster aparece como año de diseño (2006 - ......) supongo que significa que no se construyó

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